Siempre los cierres de sagas son complicados, es difícil dar gusto a los fans con el camino que los personajes tomarán y las implicaciones de ello; si a eso le sumamos que Guardianes de la Galaxia tiene un montón de personajes fuertes y entrañables la marañana se vuelve aún más complicada.
A James Gunn le tomó dos horas y media lograrlo y de qué manera. La película es un sube y baja de emociones con risas, sonrisas, sorpresas y muchas, pero muchas lágrimas. Aplaudo que no hayan tomado puerta fácil de hacer una película llena de escenas de acción, efectos especiales por todo lados que resultara muy entretenida pero sin tomar riesgos; en esta tercera entrega se apuesta más por hurgar en las entregas de los personajes: sus emociones, sus miedos, sus anhelos, su pasado y por su puesto su futuro.
Guardianes de la Galaxia 3 muestra un camino para Marvel Studios que pueda darle la vuelta a este universo con películas más profundas con un mensaje claro sin dejar por supuesto de lado la acción y ese toque que solo esta saga puede lograr.
El soundtrack por supuesto es delicioso y divertido, las escenas cómicas son un hilo conductor importante que logran llevarnos de la mano por una historia cruda y a ciertos momentos debo reconocer dolorosa.
Para mi esta es una película que debes ver en cine sí o sí; el sumar a Lucas Animation en efectos especiales fue un acierto monumental y es que aún cuando la historia tiene algunos principios difíciles de ser creíbles el trabajo de postproducción logra que en ningún momento te sientas fuera de un escenario “real”.
La película cuenta con dos escenas post créditos y un montón de guiños a las dos primeras entregas y a aquellas en las que han tenido apariciones de los personajes por lo que te recomiendo verlas para tenerlas frescas y puedas disfrutar estos momentos con más claridad.
Última recomendación: lleva una caja gigantesca de kleenex, la vas a necesitar.
¿Aún no ves el trailer? Acá te lo dejo para que termines de convencerte.